Poesía política


Buscando zapatos viejos encontré este escrito de Riechmann “El derrotado duerme en el campo de batalla” de Canciones allende lo humano, Madrid, Hiperión, 1998. retomo un fragmento y lo comparto con la concurrencia.

La poesía es dinamita para todos los órdenes establecidos de este mundo.

Heinrich Böll.


Escribir poesía política es tan legítimo como escribir poesía erótica o poesía mística: el tema de un poema nunca puede ser criterio de su calidad, y no se puede aceptar un tabú sobre ninguna de las dimensiones de la experiencia humana. (Qué tiempos estos en los que hay que luchar, luchar y seguir luchando por lo evidente...).

La fuente más importante de mala poesía política es el intento de sustituir la experiencia de otros. El poeta no propone sucedáneos de la experiencia ajena, sino que habla desde sí mismo (lo cual no quiere decir que se limite a hablar de sí mismo y de su propia experiencia). Dicho al revés: sólo en la medida en que la historia colectiva haya sido vivida como experiencia personal podrá proporcionar el punto de partida para un buen poema político.

“Resulta obvio que, fuera del vehículo libro o poema, transita la corriente poética no sólo en otras manifestaciones de las artes sino en talantes, gestos y personalidades humanas de una acentuada intensidad, gracia, misterio o sorpresa, por lo que siempre estimé que el poeta, en su formación, evitará el exclusivo paseo por los géneros acuñadamente poéticos y habrá de moverse en el espacio y en el tiempo azacaneado por otros estímulos vitales, espirituales y artísticos, sin los cuales acabará de modo fatal incurriendo en partos de los montes, monotonías, autodeslumbramientos paranoicos y crasas sandeces” (Antonio Martínez Sarrión).

La necesidad de armonizar resulta sospechosa. La veracidad es el honor del poema.
El poema trabaja contra la corrupción del lenguaje.
Símbolos, símbolos: la indignidad de engendrar distancia.
Nuestra totalidad, si en algún sentido existe, desde luego se halla fuera de nosotros. (Y está bien que sea así). Esto vale en general para el ser humano; pero para el poeta muy particularmente.

El poema no es tanto vehículo de experiencias como principio creador de ellas. Sembradas en la calcinación, espigadas entre gritos de agonía, las palabras del poema se vuelven aún más audibles. Y tienen que ser rápidas, refutables y cortantes como buenos argumentos.

Va, ajá, cabal, entonces...

14 Jutiadas :: Poesía política

  1. Piyuk, entonces se le pegó el síndrome de los zapatos?
    Y este post no se lee a drede, como los mails de Chichimeca?

  2. qué buen blog!!! ya estamos pendientes....

    salú

  3. Hey Piyuk! Debemos leer el Tratado de Semiótica General de Eco, cuando no sus obras completas (sin ánimo de ofender al Pericuyo),para entender tan digna cita?

  4. - Los zapatos están cerca de los libros, los libros están cerca de los zapatos, cerca están, estoy cerca de los libros y de los zapatos y viceversa -libros hermosos que no entiendo, zapatos viejos que no me aprietan, vivo en un libro, me dormí con los zapatos puestos. Elena, no es síndrome, sino viral como el miedo, la gripe y para algunos el amor.
    Sobre los “dredes” -léase dredes no dread- de Chichimeca, desconozco los mails enviados, pues no tengo copia de los mismos, quizás están en el otro disco duro del computador de Raúl Reyes o en los artículos reveladores que no publicó el Pais por su alto contenido candoroso y peligroso para el mantenimiento del estatus Q de la sociedad femenina salvadoreña.

    - Bienvenida a casa Miss Penny Lane, será vuestra si usted así lo quiere.

    - “pequeño vala” en total acuerdo hermano, es necesario leer teoría literaria (no de la academia -últma generación-, sino de carne, la de escritores y poetas) además no por necesidad sino por obligación debemos leer teoría política, ahí la riqueza de Riechmann, ávido lector de los teóricos del ecosocialismo y de los que le anteceden.

    Abrazos
    vale de caracol

  5. Boll en un post q a proposito no se puede leer de una sola vez. Q gracioso. Me voy a hacer fan de este blog. Y todo es culpa del devenir bloggero. Jajaja. Saludos a los Chichimeca, Pericuyo, Piyuk, Vala, etc.

  6. "Nada hay sagrado para quienes piensan.
    Con descaro llaman a las cosas por su nombre,
    elaboran análisis disipados y síntesis concupiscentes,
    se entregan a la salvaje y libertina persecución de la verdad desnuda,
    al toqueteo libidinoso de temas delicados,
    al roce de opiniones. Y se quedan tan anchos."
    Tomado de "Opinión sobre pornografía" (o algo así) de Wislawa Szymborska.

    Felicidades por su blog señores del Jute... saludos a todos!

  7. Estimado Piyuk:
    Debo decir que cuano ví este post la primera vez pensé: es parte del "buen y candoroso humor" que caracteriza al colectivo caracol. Y no me equivoqué. Sí!!! el post sí se puede leer... muy bueno, de hecho, me da una visión más amplia de la poesía, aun y cuando yo no soy poeta.
    P.D: me gusta eso de que "el poema no es tanto vehículo de experiencias como principio creador de ellas".

  8. Ah, se me olvidaba, lo de "el pequeño vala", surgió porque él se describió como el más humilde de los jutes, y no por aquellas razones que expusiste anoche, mal pensado!
    Vale de caracol, amigo.

  9. se escribe poesia no para contar experiencias, sino para crearlas. -aunque las palabras pueden ser fuente de malos entendidos- Bienvenida a esta su casa, que es la casa de nadie y de todos. Bienvenida al caracol que en este perfil tiene forma de jute, alargado y prieto -ya sabia que la poeta sos vos- suele pasar, sino preguntale al Pericuyo.
    Riechmann aborda "el vinculo" como cordón umbilical entre la materia y el espiritu, entre la poesía y el ser,entre la nada y lo que todo puede ser rescatado, vinculo que nos tiene aquí escribiendo, respondiedo.Vinculo.-

    Abrazos y un caracol para sus manos.

    Pd. sobre las medidas no doy fe, -no so ante mi- en horabuena que sea por la humildad que le caracteriza, (la tenés corta, me referia precisamente a la camisa con una rosa negra y un círculo)
    pd. Vale de miniatura (como los gallos)

  10. ayer: culiche, pyuK y yo -chichimeca no llegó y mi muy querido hermano Vala descansaba en su hogar- salimos por la noche a nuestro acostumbrado bar. Al calor de la segunda cerveza me disponía a decirle a mi hermano piyuK que en su articulo "Poesía Política" el kit estaba en la cita que constituye el tercer párrafo y a piyuK se le olvidó el nombre del autor referido y yo empecé a joderlo por eso, mas sé mi hermano que debió ser el cansancio.
    Pero bueno, lo que dice Martinez Sarrión es tan cierto pero tan cierto que refuta mi opinión sobre las temáticas o tópicos poéticos. Sin embargo no puede existir poesía "política" o poesía "erótica" y esos nombrecitos. Es poesía a secas y ya. El poeta si puede ser lo que quiera: político, snob, taber... pero la poesía es un cosa y todas las cosas, es incasillable dentro de cortos adjetivillos.

  11. No se si coincidir con don Antonio Sarrion, pero en definitiva el hombre o la mujer, que sean lo que quieran. El poeta, ese humano poeta, también poeta a secas, hermano Pericuyo.

  12. -La ley seca- miren como nos tiene esa resequedad, a secas.
    El poeta es poeta, el politico es politico, el zapatero es zapatero, el fiscal es fiscal; la propuesta central es no limitar a la poesia en los grandes temas, soledad, amor, ausencia y otros etceteras. Dejarle cabalgar tal como sabe hacerlo en su ambiente. me surge una interrogante como las ganas de un whisky malo ¿Qué puede la poesía?

  13. La poesía es dinamita para todos los órdenes establecidos de este mundo.

    Heinrich Böll.

    Escribir poesía política es tan legítimo como escribir poesía erótica o poesía mística: el tema de un poema nunca puede ser criterio de su calidad, y no se puede aceptar un tabú sobre ninguna de las dimensiones de la experiencia humana. (Qué tiempos estos en los que hay que luchar, luchar y seguir luchando por lo evidente...).

    La fuente más importante de mala poesía política es el intento de sustituir la experiencia de otros. El poeta no propone sucedáneos de la experiencia ajena, sino que habla desde sí mismo (lo cual no quiere decir que se limite a hablar de sí mismo y de su propia experiencia). Dicho al revés: sólo en la medida en que la historia colectiva haya sido vivida como experiencia personal podrá proporcionar el punto de partida para un buen poema político.

    “Resulta obvio que, fuera del vehículo libro o poema, transita la corriente poética no sólo en otras manifestaciones de las artes sino en talantes, gestos y personalidades humanas de una acentuada intensidad, gracia, misterio o sorpresa, por lo que siempre estimé que el poeta, en su formación, evitará el exclusivo paseo por los géneros acuñadamente poéticos y habrá de moverse en el espacio y en el tiempo azacaneado por otros estímulos vitales, espirituales y artísticos, sin los cuales acabará de modo fatal incurriendo en partos de los montes, monotonías, autodeslumbramientos paranoicos y crasas sandeces” (Antonio Martínez Sarrión).

    La necesidad de armonizar resulta sospechosa. La veracidad es el honor del poema.
    El poema trabaja contra la corrupción del lenguaje.
    Símbolos, símbolos: la indignidad de engendrar distancia.
    Nuestra totalidad, si en algún sentido existe, desde luego se halla fuera de nosotros. (Y está bien que sea así). Esto vale en general para el ser humano; pero para el poeta muy particularmente.

    El poema no es tanto vehículo de experiencias como principio creador de ellas. Sembradas en la calcinación, espigadas entre gritos de agonía, las palabras del poema se vuelven aún más audibles. Y tienen que ser rápidas, refutables y cortantes como buenos argumentos.

    Va, ajá, cabal, entonces...

  14. Je je yo pensé que era el google chrome, problema del browser...